Si quieren comenzar una cava para sus vinos de guarda, necesitan saber algunas reglas básicas. A continuación les presentamos tips para que sus preciados vinos maduren en condiciones óptimas.
El tamaño sí importa…
Si se vive en un estudio o departamento pequeño es difícil construir una bodega de piedra de veinte metros cuadrados. Eso sería más o menos tres cuartos de su departamento. Entonces todo depende del espacio que disponen, la cantidad de botellas que quieran almacenar y su presupuesto. En términos generales, ustedes pueden elegir:
- Estanterías. Estos tipos de depósitos pueden estar hechos de madera o metal. Es la forma más fácil de tener una “bodega”, pero mucha atención. Esta solución les sirve para pocas botellas y las condiciones de guarda no son las mejores para conservar los vinos por mucho tiempo. Las variaciones de temperatura son peligrosas si se quieren guardar durante décadas.
- Cajas de madera. Si compran su vino favorito en una caja de madera, este contenedor puede servir como una cava personal. Pero tiene que ser de madera. El cartón siempre corre el riesgo de mojarse y el exceso de humedad propicia el desarrollo de moho que es peligroso para el vino. Esta solución les sirve para una cantidad de botellas de pequeña a moderada.
- Un armario bodega o una cava / nevera. Los pueden comprar desde cinco o diez botellas hasta cincuenta. Estas modernas cavas son muy útiles cuando no se tiene mucho espacio. Pero su precio no es bajo. La diferencia entre un armario y una cava nevera es que esta última mantiene la temperatura ideal para consumir el vino cuando desee, sin tener que utilizar cubetas con hielo. Los muebles más modernos tienen compartimientos de temperaturas diferentes, lo que permite guardar vinos blancos y tintos a la temperatura del servicio adecuado (como sabemos los vinos blancos piden temperaturas más bajas que los tintos).
- Una pieza diseñada para ser una cava. Es una pieza / bodega aislada del resto de la casa y con un espacio diseñado para los vinos. Antiguamente este tipo de bodegas eran de piedra. Hoy hay un sinnúmero de soluciones para mantener los vinos en las mejores condiciones posibles.
Pero no importa si ustedes ocupan un rincón o un espacio grande para sus vinos. Lo fundamental es preocuparse de algunas condiciones clave como:
Temperatura constante
Este es el factor más difícil de regular. El lugar donde guarden los vinos, debe mantener una temperatura constante (no menos de 5ºC y no más de 18ºC). Siempre tienen que evitar las fluctuaciones extremas de temperatura. Naturalmente durante el año la temperatura promedio varía según la estación, pero no pueden permitir cambios bruscos durante un par de días. Es muy útil instalar burletes en las ventanas y puertas para evitar el exceso de calor o frío.
Luz
Una luz intensa (natural o artificial) puede provocar defectos en el vino, como un exceso de oxigenación, sobre todo en los blancos. No hay que guardarlos cerca de una luz artificial o directamente expuestos al sol. Hay que evitar exponerlos en el living (por muy atractiva que sea la etiqueta para nuestros amigos) porque la luz es enemiga del vino.
Humedad
Un buen nivel de humedad es entre 75 y 80%. Esto evita que el corcho del vino se reseque. Por esta misma razón las botellas se guardan en posición horizontal, para que el corcho siempre esté en contacto con el líquido. Antiguamente las cavas se encontraban literalmente en habitaciones de piedra, donde el suelo era poroso y mantenía la humedad óptima. Hoy día es necesario usar herramientas diseñadas especialmente para cavas modernas. Pero cuidado con este tema. Un exceso de humedad tampoco es sano para el vino, no solo destruye las etiquetas, sino que además puede dañar el corcho.
Ventilación
El espacio donde guardan sus vinos necesita una buena circulación del aire. Eso es fundamental para proteger las botellas de malos olores y moho. Además recuerden que incluso con un buen sistema de ventilación el vino aspira y absorbe aromas, por lo tanto no hay que guardarlos cerca de productos químicos, desodorantes, verduras u otros alimentos con aromas fuertes, como papas, ajo, jamones, cebollas, etc. Estos penetran a través de la porosidad del corcho y pueden cambiar el bouquet natural del vino.
Disminuir vibraciones
Las vibraciones pueden hacer que el vino se estropee. Las botellas tienen que moverse lo menos posible y estar alejadas de los electrodomésticos. Sí, sé que en los países sísmicos como Chile es difícil guardar las botellas sin movimientos. Por eso es muy importante que cada vino tenga su puesto y no necesiten mover cinco botellas cuando quieran descorchar una etiqueta. Sus estanterías tienen que ser lo más estables posible y de fácil acceso.
Por último, es muy valioso contar con un libro de cava, donde lleven un registro personal de los vinos guardados: dónde los compraron, cuándo, cuánto pagaron por ellos, cuándo abrieron las botellas, etc. Así no solo sabrán siempre los tesoros que guardan, sino además vivirán la fascinante experiencia de coleccionar vinos más intensamente.
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